EL PRINCIPIO
Cómo comenzó todo…
Una tarde lluviosa en 1987 en Taipei, Kenny Chen, fundador de Karma e ingeniero de profesión, tuvo un encuentro casual con una mujer que tenía serias dificultades para introducir la silla de ruedas de su padre en el maletero del coche.
Se detuvo para ofrecerle su ayuda. La silla de ruedas era pesada y difícil de levantar. Después de mucho tiempo y esfuerzo, lograron introducir la silla de ruedas en el maletero, pero la tapa del maletero no cerraba. Chen no podía olvidar el agotamiento y la desesperación en la cara de la mujer. La silla de ruedas suponía un reto difícil de manejar.
«¿Realmente tiene que ser de esta manera? ¿No podrían diseñarse mejor las sillas de ruedas?»
Haciendo uso de su experiencia en ingeniería y administración industrial, Chen inició KARMA.
Durante más de 30 años, Karma ha trabajado con equipos de I+D+i de varios países para crear diseños innovadores. El objetivo es proporcionar las mejores soluciones de movilidad posibles para todos los ámbitos de la vida. A día de hoy, KARMA es una marca internacional, vendiéndole a más de 40 países de todo el mundo.
La pasión y la compasión son los hitos de KARMA. En KARMA estamos comprometidos a mejorar la vida de las personas mayores y con discapacidades y ayudarles a vivir la vida al máximo.